Muchos hoy en día profesan ser cristianos porque una vez en sus  vidas  pasaron  adelante  a  un  “altar y  repitieron  una  oración, “aceptando” a Cristo. Otros piensan que son cristianos porque fueron bautizados.  Y otros piensan serlo porque nacieron en un hogar  cristiano  o  asisten  a  una  iglesia.
 
Pero según  la  Biblia, ninguna de estas cosas son las marcas de un cristiano verdadero. En Mateo 7:21-23 Jesús dice que no todo el que le diga “Señor, 
Señor” entrará en el reino de los cielos.  Muchos le dirán eso en el Día del Juicio, pero Él les contestará:
“Nunca los conocí; apártense de mí, HACEDORES DE MALDAD”.¿Entonces, cómo saber?  ¿Cómo estar seguro de no ser uno de aquellos a los cuales Jesús dirá eso en aquel día? La Biblia nos da unas pruebas para saberlo. En 2 Corintios 13:5 dice: “Pónganse a prueba para ver si están en 
la fe. Examínense a sí mismos. ¿O no se reconocen a ustedes mismos de que Jesucristo está en ustedes, a menos de que en verdad no pasen la prueba?”
Puede que alguna vez te hayan dicho que nunca debías dudar de tu salvación,  pero aquí nos dice lo opuesto. Debemos examinarnos. Y esta es una de las razones por la cual Juan escribió su primera epístola:
 
“Estas cosas les he escrito a ustedes que creen en el nombre del Hijo de Dios, para que sepan que tienen vida eterna.” 1 Juan 5:13 En el libro de Juan encontramos una serie de pruebas que nos ayudarán 
a determinar si somos verdaderos creyentes o no.
Hay muchas, pero solamente veremos cinco de ellas.
¿Estás listo?  Empecemos.
1. ¿ANDAMOS EN TINIEBLAS? “Si decimos que tenemos comunión con El, pero andamos en tinieblas, mentimos y no practicamos la verdad”. 1Juan 1:6
¿Contradice tu vida a la Palabra de Dios?  ¿Vives constantemente un 
estilo  de  vida  de  pecado, mintiendo, robando (sin  importar  el  valor), adulterando (si miras a una persona para codiciarla cometes adulterio en 
tu corazón, Mat.5:28), tomando el nombre de Dios en vano, maldiciendo, 
etc.?  Y peor aún: ¿haces estas cosas mientras profesas ser un seguidor de Cristo?  Esto se llama hipocresía. “El que practica el pecado es del diablo, porque el diablo ha pecado desde el principio…” 1Juan 3:8
2. ¿NEGAMOS TENER PECADO?
“Si  decimos  que  no  tenemos  pecado,  nos engañamos  a  nosotros mismos y la verdad no está en nosotros”. 1 Juan 1:8 ¿Eres sensible al pecado en tu vida?  ¿Cuándo fue la última vez que lloraste  o  te  quebrantaste  porque  habías  ofendido  a  un Dios Santo? ¿Aborreces el pecado?  ¿Si caes, recibes la disciplina del Señor, que Él da a todos sus hijos (Hebreos 12:5-11)?
3. ¿GUARDAMOS SUS MANDAMIENTOS?
“Y en esto sabemos que Lo hemos llegado a conocer: si guardamos Sus mandamientos. El que dice: 'Yo Lo he llegado a conocer,' y no guarda 
Sus mandamientos, es un mentiroso y la verdad no está en él”.  1 Juan 2:3-4
¿Es tu vida consumida por un anhelo intenso de ser más como Jesús? ¿Es Cristo el centro de todo?  ¿Podrían decir tus amigos y familia que Él 
es el amor más grande de tu vida y corazón?  ¿Amas  a su Palabra y te alimentas de ella constantemente?  ¿Te deleitas en el Señor, pasando tiempo  con Él  en  oración?  ¿Te  encanta  compartir  tiempo  con  otros cristianos?  ¿Predicas el evangelio de Cristo  a los perdidos?
4. ¿ABORRECEMOS ANUESTROS HERMANOS?
“El que dice que está en la Luz y aborrece a su hermano, está aún en tinieblas”. 1 Juan 2:9
¿Tienes  odio  contra  alguien  en  tu  corazón?  ¿Guardas  rencor  o amargura?  ¿Has perdonado a todos? “Todo el que aborrece a su hermano es un asesino, y ustedes saben que ningún asesino tiene vida eterna permanente en él”.1 Juan3:15
5. ¿AMAMOS ALMUNDO?
“No amen al mundo ni las cosas que están en el mundo. Si alguien ama al mundo, el amor del Padre no está en él.  Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la 
vanagloria  de  la  vida,  no  proviene  del  Padre,  sino  del  mundo”.1 Juan 2:15-16
¿Amas las cosas del mundo (la música, las películas, las series de televisión, las discotecas, etc.)? Recuerda que cualquier cosa que no glorifica a Dios en este mundo glorifica al diablo.  “No pondré delante de mis ojos cosa injusta. Aborrezco la obra de los que se desvían; ninguno de ellos se acercará a mí”.  Salmos101:3
¿Puedes sentarte y disfrutar de un programa o una película que Dios absolutamente aborrece, lleno de los mismos pecados por los cuales Jesús  tuvo  que  morir?  ¿Amas  y  deseas  las  riquezas  y  cosas 
materiales?  ¿Te atrae toda la ostentación  y el glamour que este mundo ofrece? “¡Adúlteros!  ¿No  saben  que  la  amistad  del  mundo  es  enemistad contra Dios? Cualquiera, pues, que quiera ser amigo del mundo se constituye en enemigo de Dios”. Santiago 4:4

 

 

¿Cómo te fue en el examen?  ¿Irás al cielo con el Señor, o serás uno de  aquellos  impostores que  Jesús  mandará  al  infierno?  Si  tu caminar no concuerda con la Palabra de Dios, es muy probable que no  seas  cristiano.  Es  nuestro  sincero  deseo  que  tengas  una experiencia verdadera de salvación.
Recuerda que Jesús hizo algo por ti para que no tengas que morir en 
tus pecados.  Él sufrió y murió en la cruz, llevando sobre su cuerpo tus 
pecados y el castigo que justamente merecías: la ira de Dios.  Él derramó su sangre y se hizo una maldición para que tú puedas tener 
vida eterna. Y resucitó de entre los muertos en el tercer día y venció a la muerte.Entonces, ¿qué debemos hacer para ser salvos?  La Biblia dice que 
tenemos  que  nacer  de  nuevo  (Juan  3:3).  La  única  forma  que 
podemos hacerlo es por medio del arrepentimiento y la fe.    El  arrepentimiento  significa  pedirle  perdón a  Dios  y  apartarnos  del pecado, estando dispuestos a dejar nuestro estilo de vida pecaminoso. Tener fe en él no significa creer intelectualmente (los demonios creen y tiemblan, Santiago 2:19), sino poner toda nuestra confianza en él y su 
obra  completada  en  la  cruz,  entregarle  todo nuestro  corazón. 
Si haces esto Dios realmente te salvará y te dará un nuevo corazón con nuevos  deseos. Serás  una  nueva  criatura  en  Cristo (2  Cor.5:17)  y 
empezarás  una  verdadera  relación  con  él. Y la Biblia  dice  que  en verdad sabrás que eres un hijo de Dios:“El Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíritu de que somos hijos de Dios.” Romanos 8:16
 
¿Después de tan grande sacrificio que Jesús hizo por ti en la cruz, no crees que Él merece todo? ¿Menospreciarás el regalo que te ofrece o le entregarás toda tu vida?  Por favor, arrepiéntete y pon tu fe en Él antes de que sea muy tarde.  !Hazlo hoy!  2 Corintios 6:2